Neonatología y RCP MaterCare | Lunes 27 de Julio de 2020
1 al 7 de agosto
Es por esto que nos gustaría compartirles información acerca de la lactancia materna.
La mayoría de las mujeres desean amamantar a sus hijos recién nacidos. Está en su naturaleza. La lactancia al pecho es feliz antes que nada por el vínculo especial que se genera entre madre e hijo.
La lactancia exclusivamente materna durante los primeros seis meses de vida aporta muchos beneficios tanto al niño como a la madre. La leche materna es muy importante porque es la más segura, protege contra muchas infecciones graves, disminuyendo así las internaciones y la mortalidad infantil. Es higiénica ya que el niño la toma directamente de su mamá. Está disponible a toda hora y en cualquier lugar. Favorece un mejor desarrollo emocional, psico motor, social e intelectual.
El primer contacto se debería dar en la primera hora de vida, si es posible, en la sala de partos. Aquí el bebé descubrirá de dónde vendrá se alimento. Este primer contacto con el pecho tiene beneficio tanto para el bebé como para la mamá. Para el bebé, porque la succión temprana lo retorna a lo que hacia dentro del útero y lo calma de la tensión del parto; porque el calostro (primera leche materna que produce la mujer) que obtiene, aunque sea poquito, es un concentrado de nutrientes y tiene anticuerpos que lo protegen de infecciones graves y tiene efecto laxante para que elimine más pronto el meconio (materia fecal del recién nacido que es verde oscura y pegajosa).
Para la mamá, la succión temprana estimulará la secreción de óxitocina, que tiene doble efecto: provoca “bajadas” de calostro y hace contraer el útero. Esto último ayuda a controlar la hemorragia postparto y a recuperar más pronto el tamaño preparto del útero.
La lactancia debe ser a “libre demanda”, es decir, que se debe alimentar al bebé cada vez que lo pide, durante el día y la noche. No hay que esperar que el bebé llore para amantarlo, el niño lo indicará chupándose el dedo o moviéndose mucho. Para que la mamá pueda producir la leche que su bebé necesita, el niño debe ser amamantado con frecuencia.
Existen diferentes posiciones para amamantar, con la ayuda de una puericultora pueden elegir la posición que a la mamá y a su bebé les siente más cómoda.
La leche materna debe ser el único alimento que reciba el bebé durante los primeros 6 meses de vida porque le brinda todos los elementos que necesita para su
recimiento y desarrollo saludables. No se debe alimentar al niño con jugos, agua, té ni ningún otro líquido. La leche materna también es una fuente importante de energía y nutrientes para los niños de 6 a 23 meses. Puede aportar más de la mitad de las necesidades energéticas del niño entre los 6 y los 12 meses, y un tercio entre los 12 y los 24 meses.
Cuando la mamá tiene que volver a trabajar afuera de su casa y tiene que separarse de su hijo puede continuar con la lactancia. Para ello puede extraerse manualmente su leche y conservarla en un recipiente limpio y tapado. Es necesario entibiarla siempre a baño maría y nunca hervirla ni calentarla en microondas para que no pierda sus propiedades.
Algunos tips para favorecer la lactancia materna:
Hablaremos de este tema y otros más en el taller de CUIDADOS DEL RECIÉN NACIDO SANO que se dictará el jueves 20/08 a las 17 horas. ¡Súmate!
Dra. Romina Dini
Neonatóloga
Médica neonatóloga, dedicada a los cuidados del recién nacido y especialista en dictar talleres de RCP y primeros auxilios destinados a toda la familia, desde lactantes hasta adultos.